Enfermedad de Crohn y Colitis ulcerosa: Dos caras de una misma moneda

29/01/2003
2 min lectura
Enfermedad de Crohn y Colitis ulcerosa: Dos caras de una misma moneda

El conocimiento de estos tres factores involucrados -genes, bacterias y sistema inmune- ha permitido desarrollar y aplicar nuevas estrategia terapéuticas en estos últimos 10 años.

También existe la creencia de que estas enfermedades están relacionadas con problemas de salud mental, principalmente estrés. El doctor Valderrama dice que, 'si bien no se ha demostrado científicamente que exista una relación directa, los gastroenterólogos con experiencias en este tema y los pacientes observan que los episodios de mayor inflamación se relacionan con estados de estrés importantes'.

Enfermedad de Crohn

De los dos tipos de enfermedad intestinal, la más grave es la Enfermedad de Crohn. Puede afectar a todo el tubo digestivo, siendo las zonas más comprometidas el íleon (segmento final del intestino delgado) y el colon, y a todas las capas que componen la pared de este conducto: mucosa, musculo y serosa.

'En la actualidad, hay consenso de que el origen de esta patología tiene un componente genético mucho mayor que en el caso de la colitis ulcerosa', destaca el doctor Valderrama.

La sintomatología no es tan evidente, por lo tanto, se prolonga en el tiempo. La manifestación más frecuente es la diarrea crónica y dolor abdominal. Menos común, pero de mayor gravedad, son las lesiones perianales y fístulas, y aunque es mucho más raro, también pueden aparecer aftas recurrentes en la cavidad oral.

La Enfermedad de Crohn tiene mortalidad y complicaciones muy graves si no es tratada. El tratamiento incluye la asociación de fármacos inmunomoduladores y biológicos. El éxito del tratamiento es relativo, pero en un importante porcentaje de casos se logra mejoría.

Colitis ulcerosa

La colitis ulcerosa sólo afecta a la mucosa que recubre el colon y su principal síntoma es deposiciones con sangre. Si bien no es tan grave como la enfermedad de Crohn, si no se controla y trata, puede desarrollar complicaciones que van desde una anemia, infecciones y obstrucción del colon, hasta un cáncer.

El tratamiento depende de qué tan extensa sea la zona afectada. Cuando está comprometido sólo el recto, que es lo más frecuente, el tratamiento es tópico con supositorios o enemas de mesalazinas (antiinflamatorio derivado de la aspirina) o de corticoides. Cuando existe un compromiso del todo el colon hay que evaluar la intensidad de la inflamación y los segmentos afectados. De acuerdo a eso, se indican desde mesalazina e inmunomoduladores, hasta la asociación de estos últimos con corticoides y fármacos biológicos. Estos tratamientos bien administrados pueden ser altamente eficaces.

Servicio de Gastroenterología
Teléfono: 210 1055



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Un progresivo deterioro de la calidad de vida es lo que experimentan quienes sufren de enfermedad inflamatoria intestinal, patología que afecta al intestino y que se divide en dos tipos: Enfermedad de Crohn y Colitis ulcerosa, la más frecuente.

De acuerdo con una publicación de 2008 de la Revista Médica de Chile, la incidencia de esta patología se ha incrementado en el último tiempo en diversos países, paralelamente al progreso de las sociedades. Aunque en Chile no existen datos estadísticos, la experiencia clínica demuestra un aumento en los últimos años en la atención de pacientes afectados.

El doctor Rodrigo Valderrama, gastroenterólogo de Clínica Alemana, explica que la causa de esta enfermedad es desconocida, ya que no se ha identificado relación causa-efecto con un único agente que explique todos sus aspectos. 'La teoría de su origen sugiere que la inflamación intestinal se produce por una reacción anormal de los Linfocitos T -un tipo de glóbulos blancos del sistema inmunitario- hacia la flora bacteriana de los intestinos, en individuos genéticamente susceptibles', sostiene.

El conocimiento de estos tres factores involucrados -genes, bacterias y sistema inmune- ha permitido desarrollar y aplicar nuevas estrategia terapéuticas en estos últimos 10 años.

También existe la creencia de que estas enfermedades están relacionadas con problemas de salud mental, principalmente estrés. El doctor Valderrama dice que, 'si bien no se ha demostrado científicamente que exista una relación directa, los gastroenterólogos con experiencias en este tema y los pacientes observan que los episodios de mayor inflamación se relacionan con estados de estrés importantes'.

Enfermedad de Crohn

De los dos tipos de enfermedad intestinal, la más grave es la Enfermedad de Crohn. Puede afectar a todo el tubo digestivo, siendo las zonas más comprometidas el íleon (segmento final del intestino delgado) y el colon, y a todas las capas que componen la pared de este conducto: mucosa, musculo y serosa.

'En la actualidad, hay consenso de que el origen de esta patología tiene un componente genético mucho mayor que en el caso de la colitis ulcerosa', destaca el doctor Valderrama.

La sintomatología no es tan evidente, por lo tanto, se prolonga en el tiempo. La manifestación más frecuente es la diarrea crónica y dolor abdominal. Menos común, pero de mayor gravedad, son las lesiones perianales y fístulas, y aunque es mucho más raro, también pueden aparecer aftas recurrentes en la cavidad oral.

La Enfermedad de Crohn tiene mortalidad y complicaciones muy graves si no es tratada. El tratamiento incluye la asociación de fármacos inmunomoduladores y biológicos. El éxito del tratamiento es relativo, pero en un importante porcentaje de casos se logra mejoría.

Colitis ulcerosa

La colitis ulcerosa sólo afecta a la mucosa que recubre el colon y su principal síntoma es deposiciones con sangre. Si bien no es tan grave como la enfermedad de Crohn, si no se controla y trata, puede desarrollar complicaciones que van desde una anemia, infecciones y obstrucción del colon, hasta un cáncer.

El tratamiento depende de qué tan extensa sea la zona afectada. Cuando está comprometido sólo el recto, que es lo más frecuente, el tratamiento es tópico con supositorios o enemas de mesalazinas (antiinflamatorio derivado de la aspirina) o de corticoides. Cuando existe un compromiso del todo el colon hay que evaluar la intensidad de la inflamación y los segmentos afectados. De acuerdo a eso, se indican desde mesalazina e inmunomoduladores, hasta la asociación de estos últimos con corticoides y fármacos biológicos. Estos tratamientos bien administrados pueden ser altamente eficaces.

Servicio de Gastroenterología
Teléfono: 210 1055




Esta información es meramente informativa y no sustituye la opinión de un profesional de salud. Ante cualquier síntoma o molestia, te recomendamos consultar con tu médico. Además, ten en cuenta que, debido a la naturaleza cambiante de los temas tratados en este artículo, algunos conceptos pueden sufrir modificaciones desde la fecha original de la publicación.
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