Cómo influye el estilo de vida en la fertilidad masculina

La infertilidad en una pareja principalmente proviene desde el lado masculino, para solucionar esto existen diferentes avances médicos siendo el más utilizado la fertilización asistida.

Por Clinica Alemana feb. 18, 2005, 10:40

Diversos estudios sostienen que el estrés, la contaminación ambiental y el tipo de alimentación actual han influido negativamente en la fertilidad masculina, fenómeno que sumado a los avances en los métodos diagnósticos, ha provocado un aumento en la detección de casos de infertilidad en los hombres.

Aunque no existen estadísticas internacionales sobre esta materia, varias investigaciones publicadas en revistas científicas, como la Human Reproduction, muestran esta tendencia. De acuerdo con el doctor Gonzalo Duque, jefe del Servicio de Medicina Reproductiva de Clínica Alemana, 'en las últimas décadas los cambios en la calidad de vida de las personas han ido deteriorando la capacidad de tener una cantidad de espermios suficientes y de buena calidad'.

Una de los pocos estudios al respecto, es el que realizó la Organización Mundial de la Salud entre 1979 y 1984 en 5.800 parejas infértiles de 22 países desarrollados y en vías de desarrollo, el cual reveló que el factor masculino contribuía de alguna forma a la infertilidad en más de la mitad de los casos.

Además del estrés y la contaminación, destacan como elementos dañinos la exposición a pesticidas, las enfermedades de transmisión sexual, la ingesta de alimentos alterados, el uso de anabólicos, y el consumo de cigarrillo y otras drogas.

'En el caso específico del estrés, esto se explica porque la excesiva actividad puede disminuir la producción espermática, ya que el testículo es regulado por el sistema nervioso central', sostiene el doctor Duque.

Otro factor que influye en este aumento de la infertilidad masculina es el avance en las técnicas diagnósticas. Gracias a ellas se han podido identificar las principales causas de esta afección, que son básicamente trastornos a nivel de la función espermática y de fecundación.

'A esto se suma que socialmente cada vez se reconoce más que un porcentaje importante de las causas de infertilidad en la pareja se debe a un problema masculino, cosa que antes no sucedía, ya que la gran mayoría de las veces se le atribuía la responsabilidad a la mujer', sostiene el doctor Duque.

Camino a la paternidad

Gracias al acelerado avance médico en esta materia, hoy la gran mayoría de los casos de infertilidad masculina puede tratarse. 'Lo importante es tener siempre presente que es un problema de la pareja y que debe abordarse como tal', recalca el especialista.

El método más utilizado es la fertilización asistida, que busca facilitar la llegada del espermatozoide al óvulo. Dentro de estas técnicas las más conocidas son las de inseminación intrauterina que consisten en introducir una selección de los espermios con mejor movilidad y formas normales en el útero.

'Estos métodos tienen un rendimiento de 45% al cabo de cuatro procedimientos, pero requieren que el paciente tenga por lo menos una concentración espermática moderada, ya que cuando no hay suficientes espermatozoides o éstos no funcionan bien no sirve, y es necesario usar técnicas de mayor complejidad'.

Dentro de estas últimas se encuentra la fertilización asistida, como el ICSI (inyección intracitoplasmática de un espermatozoide en el óvulo), procedimiento que permite la fecundación de óvulos humanos en casos de varones con trastornos espermáticos severos.

En esta materia Clínica Alemana ha sido pionera a nivel mundial, al desarrollar una variante del ICSI, denominada SOFT (sperm-injected oocyte fallopian transfer) que consiste en la transferencia inmediata a la trompa de Falopio de ovocitos microinyectados por ICSI.

Esta variante, que se realiza por laparoscopía, fue desarrollada por el equipo de Medicina Reproductiva de Clínica Alemana en 1998 y ese mismo año se logró el primer embarazo.

Cómo prevenir

Para evitar que la infertilidad masculina siga en aumento, el especialista es enfático al afirmar que la clave está en cambiar ciertos hábitos. Recomienda mejorar la alimentación, protegerse de infecciones sexuales, mantener una buena higiene y realizar periódicamente un control con el urólogo.

También aconseja evitar el uso de ropa interior o pantalones muy ajustados, porque dificultan la regulación de la temperatura de la zona, lo que afecta la capacidad espermática.

Por último, advierte que si se va a ser sometido a un procedimiento que pudiera afectar la fertilidad - como extracción de un testículo, radioterapia o quimioterapia- es recomendable congelar muestras espermáticas que permitan realizar una fertilización asistida a futuro.