Marzo es como un golpe de realidad para todos. Se acaban las vacaciones y retornan los colegios, por lo que nunca es fácil comenzar este mes. Sin embargo, en este periodo se puede hacer especialmente difícil, porque hemos tenido que adaptarnos a una suerte de nueva normalidad que se ha visto forzada por la pandemia por Covid-19.
En este contexto, Solange Anuch, psicóloga de Clínica Alemana, asegura que, para enfrentar este proceso, “primero es importante saber que el Covid-19 generó cambios y generó cambios porque en un momento determinado dejó al mundo en pausa y nos obligó a cada uno de nosotros a revisar como estábamos haciendo las cosas y nos cambió de un momento a otro las prioridades”.
Así, la pandemia “puso en el pedestal las necesidades de reencontrarnos y ayudarnos unos a otros. Digo esto porque antes de planificar una nueva manera de enfrentar nuestras vidas importante sacar algunos planteamientos que la pandemia nos recuerda cuán interdependientes somos, que todos los seres humanos compartimos los mismos problemas, las mismas esperanzas y, en general, poseemos el mismo potencial. Somos una gran familia humana y que lo que hacen unos afectará rápidamente a otros, por lo tanto, debemos cultivar la paz mental que nos permita mantener siempre en el horizonte de nuestras preocupaciones la vida de los otros, que nos permita siempre saber cómo ayudar a otros porque finalmente haciendo eso nos ayudamos a nosotros mismos”, agrega.
¿Cómo retomar la vida diaria?
En primer lugar, es sumamente relevante replantearse cómo reconstruir una manera que nos ayude a vivir y adaptarnos mejor al período que sigue. Definir qué queremos cambiar y cuáles son las cosas que buscamos mantener y qué nos gustaría recuperar del periodo de prepandemia ayudaría a reorganizar las rutinas familiares.
En segundo lugar, hay que perder miedo a salir. “Es importante tener presente que aunque la cuarentena en un momento fue una sana precaución, ahora se abre y se presenta frente a nosotros una oportunidad para reencontrarnos con la vida, con el exterior, con el aire libre, con los espacios públicos y compartir con las amistades que durante mucho tiempo tuvimos que dejar de ver, de acariciar, de escuchar y de sentir, evidentemente que con las medidas necesarias de cuidado que ya conocemos”, expresa la psicóloga de Clínica Alemana.
Otras recomendaciones entregadas por la experta son:
- Tener en mente que hoy día tenemos una esperanza real y concreta: la presencia de una vacuna efectiva y segura.
- Plantearse qué queremos sostener de la vida que teníamos prepandemia, porque nos obligó a reinventarnos en muchas cosas, a crear nuevas maneras, a crear nuevos modos de vivir, a innovar y emprender.
- La organización tiene que ser flexible, de manera que le demos un espacio a los nuevos sistemas que nos han servido para una mejor convivencia familiar o para un mejor desarrollo laboral. Hay que hacer una evaluación de qué ha sido realmente eficiente y que pudiéramos mantener con flexibilidad ahora.
- Al partir marzo también es importante reforzar la confianza en nosotros mismos respecto de lo que ya sabemos que podemos hacer y nos resulta. Hemos vivido una difícil etapa de pandemia, en general, la familia ha intentado enfrentar con todos sus recursos entonces hay una capacidad de enfrentamientos efectivos que debemos valorar.
- Debemos anticipar las dificultades durante la primera etapa de habitación y de reintegro tanto a nivel educacional como laboral. Probablemente los sistemas serán híbridos y ya sabemos los traspiés que tienen tanto el trabajo como en la educación virtual o presencial.
- Para quienes perdieron familia, enfrentar el nuevo año incorpora el honrar y dar un valioso espacio en la memoria a quienes han partido.
- Se recomienda también hacer parte a los hijos de la nueva reorganización del hogar para este año 2021 reorganización que va a contemplar preparar la casa y sus ambientes.
- Probar tácticas de calma, relajación y deporte que se puedan practicar en casa. Así, frente a cualquier cambio podremos continuar con aquello que nos hace bien.
- Valorar los espacios públicos y cuidar de otros. Considerar necesarios los descansos y pausas para el teletrabajo.
- Quienes poseen creencias religiosas, brindar momento para reforzar la fe y enfrentar una nueva etapa de la vida.
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