.tmb-casmovil.jpg?sfvrsn=16f74ed_1 "¿Cómo entrenar el cerebro para ser feliz?")
La felicidad parece ser un propósito importante en la vida de muchas personas en nuestra sociedad. Por esto, cabe preguntarse, ¿cómo saber si soy realmente feliz?
De acuerdo con el doctor Rolando Castillo, psiquiatra de Clínica Alemana, “como la felicidad es una apreciación mayormente subjetiva, el solo preguntárselo y puntuarlo en una escala de 1 a 10 puntos, para luego analizar los factores que explican la respuesta debería ser suficiente para responder si uno es feliz o no”.
“Para poder objetivar esto lo más posible, lo ideal es hacerse esta pregunta varias veces en diferentes momentos de la semana o correlacionarlo con la perspectiva de otros para eliminar el ruido de una emoción o situación negativa transitoria”, agrega el especialista.
Si haces este análisis y llegas a la conclusión de que no eres feliz, no te desanimes. Si bien, se dice que hay un componente en la disposición anímica que es genético y otro que tiene relación con la suerte de lograr ciertos eventos prototípicos de la vida, también hay una parte que es 100% trabajable, dice el doctor Castillo. “Este último es producto del trabajo personal e interpretación que uno haga de las cosas en la vida. Finalmente hay que contarse una ‘buena historia real’ más que una ‘mala historia real’ de uno mismo”, agrega.
¿Qué es la felicidad?
El doctor Castillo asegura que la definición de felicidad varía según la época, cultura y subjetividad personal. Sin embargo, actualmente habría más o menos un consenso de que la felicidad es un estado de bienestar determinado por una mezcla de:
Hedonia: equilibrio afectivo entre sentimientos positivos y negativos. Esto está basado en un sistema límbico sano (parte del cerebro que regula las emociones). Se relaciona a la posibilidad de tener sentimientos positivos transitorios por placeres fundamentales como la comida y el sexo, así como otros placeres superiores como los monetarios, artísticos, sociales, altruistas, trascendentales. Esto explicaría por qué una persona deprimida con un síntoma llamado anhedonia (incapacidad de poder sentir placer) no pudiera sentirse completamente feliz incluso siendo exitoso en lo amoroso-relacional y socio-laboral.
Eudaimonía Aristotélica: satisfacción con la vida personal en relación a un estándar, propósito o significado de vida. Basado en redes cognitivas de valoración biográfica personal e introspección. Más vinculado a un sentimiento de satisfacción existencial duradero y sólido. En general, requieren altos montos de todo trabajo y perseverancia y suelen vincularse a relaciones significativas o a desarrollo de proyectos de vida. Esto podría explicar por qué una persona con acceso ilimitado a drogas de placer o dinero con acceso a bienes materiales y sociales no necesariamente tendría que ser feliz, si no hay un propósito o construcción biográfica atrás de estos bienes.
Entrenando el cerebro para ser feliz
Son múltiples los factores que pueden incidir en la felicidad de una persona. Por esto, entre las formas que existen para entrenar al cerebro para ser felices, el experto reconoce:
• Cuida tu salud física y mental, en base a deporte, alimentación, sueño y no consumo de sustancias.
• Desarrolla tu inteligencia emocional, es decir, interpersonal, intrapsíquica, control de impulsos y perseverancia. Se la mejor versión de ti mismo.
• Busca el placer en cosas simples pero fundamentales de la vida, sensaciones, sabores, olores, la naturaleza, las personas, el trabajo.
• Encuentra el desafío/sentido y no el castigo en los eventos de la vida.
• Ten una actitud de optimismo/esperanza y gratitud frente a los eventos de la vida.
• Desarrolla tu capacidad de asombro.
• Mira de forma equilibrada todas las áreas de tu vida y no solo partes.
• Cultiva tus redes de amigos y familiares.
• Se generoso y compasivo con las otras personas.
• Evita comparaciones con estándares sociales no representativos (por ejemplo, artistas o futbolistas famosos multimillonarios), especialmente a través del mundo de las redes sociales
• Esfuérzate en ser virtuoso en algún área que quieras desarrollar.
• Ponte expectativas y metas razonables y realistas de manera progresiva.
• Intenta buscar un trabajo u ocupación con propósito.
• Ten un buen equilibrio entre el trabajo duro y los momentos de ocio y recreación sana.
Ten en cuenta que si nada de esto ayuda, debes buscar ayuda profesional de psicólogo o psiquiatra.
